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Uno de los regenerantes celulares más potentes que existen en la naturaleza es la manteca de karité, lo que la convierte en un poderoso aliado contra el envejecimiento.
Entre sus principales cualidades destaca su capacidad suavizante de la piel y reestructurante de arrugas y estrías, así como su poder reparador de cabellos secos y estropeados.
La manteca de karité tiene una textura mantecosa y aunque se puede aplicar directamente sobre la piel, es complicado debido a su dureza.
Normalmente la encontrarás como componente en algunos de tus tratamientos de belleza naturales; cremas hidratantes, jabones artesanales, mascarillas para el pelo, cremas antiestrías, bálsamos labiales, etc.
Se trata por tanto, de un excelente producto natural para el cuidado facial y corporal.
Es importante destacar que la manteca de karité conserva intactas sus propiedades en el jabón natural, por lo que podrás disfrutar de todos sus beneficios en nuestros jabones artesanales, ya que forma parte de los ingredientes de los jabones de avena, chocolate, sal del Himalaya, semilla de amapola, rosa mosqueta, arcilla verde y, por su puesto, de nuestros bálsamos labiales.
2 comentarios
Estupendo
Gracias Josefa.